-
Arquitectos: Pereira Miguel Arquitectos
- Área: 250 m²
- Año: 2021
-
Fotografías:Fernando Guerra | FG+SG
-
Proveedores: BANDALUX, Pedra e Decoraçao
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Situada en Comporta, la Casa MJA es el resultado de la ampliación de una casa existente. El proyecto se establece en un nuevo conjunto arquitectónico compuesto por cuatro volúmenes distintos perpendiculares a la casa principal, un pequeño núcleo de acceso y una piscina, pieza central entre todos estos elementos. Los nuevos volúmenes están definidos por plataformas rectangulares de hormigón, apoyadas en el suelo en un solo nivel.
Su implantación fue concebida para preservar todos los árboles existentes, dispuestos entre pinos y alcornoques, y para aprovechar una orientación solar favorable. También se estudió estratégicamente el posicionamiento respecto a la preexistencia para crear un conjunto con fuertes relaciones visuales entre todos los elementos. Esto, busca mantener una distancia controlada de la casa, para valorar el espacio entre la vivienda principal y las construcciones propuestas. Es precisamente este espacio intersticial el que permite que todo el conjunto se comunique, uniéndolo como un lugar natural.
De este modo, el contacto entre la preexistencia y las nuevas construcciones se realiza a través de un camino de tablas de madera, que parte del jardín hacia el sureste, por el que se ramifican otros caminos, junto a los cuales se establecen los cuatro volúmenes paralelepípedos. Además, se añadió un núcleo de acceso junto a la casa principal, que funciona como espacio de entrada exterior. Se pretendía que este volumen, de vidrio espejado, desapareciera por completo y se fundiera con el paisaje. Este elemento establece así una relación espacial entre la casa y la entrada, buscando una posición clara en la articulación entre los diferentes volúmenes.
Los cuatro volúmenes presentan un lenguaje formal y un sistema constructivo muy similar entre ellos, distinguiéndose por un módulo con mayor volumen, de morfología diferente y que está destinado al ámbito social, con salón y convivencia. Estos elementos se caracterizan por cubiertas planas compuestas por una sucesión de vigas de madera que se extienden desde el interior hacia el exterior, desmaterializándose al llegar al exterior. Esta proyección de las cubiertas no sólo crea una generosa zona de sombra alrededor de los volúmenes, protegiendo los espacios durante el verano, sino que también promueve una sensación de continuidad espacial y mejora la experiencia de contemplar el paisaje.
En una estrategia para extender las experiencias interiores a los espacios de vida exteriores y, en consecuencia, valorar las características naturales de este lugar, se diseñó un patio exterior cerrado en los tres módulos más pequeños. Estos volúmenes, que constituirán cada uno una suite independiente (con un dormitorio y un baño), aprovecharán su relación con el exterior a través de las plataformas de cubierta que los rodean, y de forma más privada y contenida, a través de sus respectivos patios.
